Cada minuto se adquieren un millón de botellas de plástico y se utilizan 500,000 millones de bolsas al año. De los cuales ocho millones de toneladas acaban en los océanos, amenazando la vida marina. Pero a pesar de la imagen negativa que la sociedad ha puesto sobre la industria del plástico, las empresas se han unido para colaborar con gobiernos y asociaciones para disminuir la contaminación. Si quieres conocer cuales son los compromisos que adoptaron, sigue leyendo.
Desde hace años muchas empresas se han acercado a científicos y grupos de conservación para evitar que los plásticos llegarán al mar, sin embargo, al ver la gravedad de la situación, la ONU convocó a más de 75 asociaciones de 40 países a firmar la declaración de las Asociaciones Mundiales de Plásticos, donde se comprometen a trabajar de forma conjunta con gobiernos, ONG e investigadores para evitar los desechos marinos. Los objetivos son:
- Contribuir con soluciones, trabajando conjuntamente el sector público y el privado para evitar los residuos marinos;
- Trabajar con la comunidad científica y con investigadores para comprender mejor y evaluar el alcance, el origen y el impacto, y las soluciones de los residuos marinos;
- Promover políticas integrales basadas en la ciencia y reforzar las leyes existentes para evitar los residuos marinos;
- Colaborar en la divulgación de la información sobre prácticas y sistemas de gestión de residuos ecológicos y eficaces, en particular en comunidades y países que lindan con océanos o cuencas fluviales.
- Reforzar las oportunidades de recuperar productos plásticos para reciclado y recuperación de energía;
- Colaborar en el transporte y distribución de gránulos de resina plástica y de productos del proveedor al cliente, para evitar pérdida de producto y para incentivar al cliente a hacer lo propio.
Los países tiene metas ambiciosas: los gobiernos planean una “reducción significativa” de los plásticos de un solo uso en 2030. También se busca transformar nuestra forma de vida, con el fomento de medidas para la reducción de la dependencia de plásticos y la gestión racional de la basura. Asimismo, buscan que las empresas construyan una economía global circular, y los bienes puedan reutilizarse o destinarse a otros fines, así como aportar al consumo y la producción sostenibles.
En Latinoamérica las medidas contra el plástico de un solo uso han avanzado rápidamente; evidenciando que este sector debe apostar en avances tecnológicos y en tendencias como la sostenibilidad, bioplásticos, reciclaje y el internet 4.0 para participar en los nuevos escenarios del mercado internacional.
Y tú ¿crees que las empresas están realizando los esfuerzos suficientes?
